El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado este jueves que ha pedido a dos miembros de la misión cubana ante la ONU que dejen el país por haberse «involucrado en actividades dañinas para la seguridad nacional estadounidense».
«Después de que dos miembros de la misión cubana en la ONU se involucraran en acciones dañinas para la seguridad estadounidense, les hemos pedido que se vayan de EE.UU.», ha dicho en un mensaje en Twitter la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus, sin ofrecer más detalles.
El Ejecutivo estadounidense también ha restringido los movimientos del resto de la misión cubana ante la ONU, que, a partir de ahora, solo podrá moverse por Manhattan, el centro de negocios y administrativo de Nueva York y donde se ubica el edificio que sirve de sede a Naciones Unidas.
«Los miembros de la misión de Cuba en la ONU también tienen restringida su estancia a Manhattan. Tomamos en serio todos y cada uno de los intentos contra la seguridad nacional de EE.UU.», ha subrayado Ortagus.
Actualmente, los diplomáticos de Cuba en EE.UU. y los estadounidenses en La Habana tienen restringidos los movimientos y solo tienen capacidad para desplazarse por una determinada zona, aunque sí que pueden solicitar una autorización para viajar a otra parte del país.
Ortagus no ha mencionado el nombre de los diplomáticos afectados o su rango, y tampoco ha ofrecido detalles sobre las actividades «dañinas» en las que supuestamente han participado.
La misión de Cuba ante la ONU está formada por 16 personas, según los últimos datos que aparecen en su web.
Desde que llegó a la Casa Blanca, Trump ha endurecido la política hacia la isla
Cuba suele usar la plataforma de la ONU para pedir el fin del embargo comercial y económico sobre la isla. Desde 1992, cada año, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprueba un texto que no tiene carácter vinculante, pero en el que se insta a EE.UU. a acabar con el bloqueo y se resaltan sus efectos negativos.
EE.UU. y la ONU suscribieron en 1947 un acuerdo para que Nueva York sirviera como sede del organismo internacional y, a cambio, las autoridades estadounidenses se comprometieron a «no imponer ningún impedimento de tránsito en la entrada o salida» de los diplomáticos acreditados.
No obstante, Washington se reserva la capacidad de expulsar a los diplomáticos que cometan algún delito, aunque no puede juzgarlos porque gozan de inmunidad diplomática.
Desde que llegó a la Casa Blanca en enero de 2017, el presidente Donald Trump ha endurecido la política hacia Cuba con reducciones del personal diplomático, el aumento del embargo comercial, restricciones a los cruceros y limites a los viajes de estadounidenses a la isla, aunque los vuelos comerciales siguen operando con normalidad.
El recrudecimiento de las sanciones se ha dejado notar en la isla, entre otros ámbitos en el turismo, con un descenso de las visitas.
Cuba rechaza la «injustificada» expulsión
Por su parte, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, ha considerado «injustificada» la expulsión y ha calificado como «vulgar calumnia» el motivo esgrimido por EE.UU.
«Rechazo categóricamente injustificada expulsión de 2 funcionarios de la Misión Permanente de #Cuba en #ONU y endurecimiento de restricción de movimiento a los diplomáticos y familias», ha publicado el ministro de Exteriores cubano en Twitter.
Fuente: RTVE