Varios ciudadanos se tomaron las calles en Cuenca

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A las 10h00 de este lunes 14 de octubre de 2019 se concentraron varios ciudadanos en la puerta principal de la Universidad de Cuenca para realizar una marcha pacifica en homenaje los heridos y fallecidos en estos once días de Paro Nacional.

Además, habitantes de Molleturo y otros colectivos sociales se sumaron a la marcha para presionar la eliminación del decreto 883 al presidente de la República, Lenin Moreno.

Previamente a la marcha, un grupo de ciudadanos denominados «Asamblea Popular Autónoma», leyeron una carta la cual detallaba una felicitación al movimiento indígena y gobierno nacional tras el primer acuerdo anunciado ayer, el cual deja sin efecto el decreto 883 para construir un nuevo decreto participativamente, tal como demandaba la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE).

Además este grupo mencionó enfáticamente lo siguiente: «Exigimos la salida y apertura de los correspondientes procesos legales contra la Ministra de Gobierno, María Paula Romo y el Ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, así como la renuncia del Gobernador del Azuay, Xavier Martinez».

Luego aseguraron que fueron días de una violencia desconocida para el país, pero sobre todo para el movimiento indígena y los jóvenes universitarios que soportaron la represión. «Los crímenes deben ser investigados y sancionados para que el Estado asuma la reparación», expresaron.

La marcha pacifica inició en la avenida 12 de abril, subieron por la calle La Condamine y continuaron hacia el centro histórico de Cuenca con dirección al Parque Calderón, donde también se concentró otro grupo de ciudadanos convocados por el Prefecto del Azuay, Yaku Pérez.

Varios ciudadanos de la marcha estudiantil brindaron refrigerios a la Policía Nacional, «Porque esta lucha no es contra ellos. Todos somos hermanos ecuatorianos», aseguraron.

La marcha terminó al frente de la Gobernación del Azuay, mientras se realizaba una presentación artística de baile y música por parte de colectivos sociales de la ciudad.

Texto e imagen de: Tomás Villota