Moradores insisten en reubicación de la zona de tolerancia

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Representantes de sectores aledaños a la zona de tolerancia insisten en la reubicación de los burdeles del barrio Cayambe.
Como parte de las actividades de “resistencia” -como lo denominan ellos- ha sido conformado el movimiento “Reubicación de Burdeles”, así piden al Municipio de Cuenca un informe del avance del Plan de Ordenamiento Territorial.
Los moradores temen que no se considere los pedidos y la problemática continúe en el sitio de manera indefinida.
Piden que las autoridades de forma técnica busquen un nuevo lugar para su ubicación, pero que esto no signifique simplemente trasladar los conflictos a otro lugar, sino de dar soluciones.

Abel Buestán, uno de los representantes barriales que pide la reubicación de los burdeles, detalla que ya son más de 50 años que los burdeles funcionan en el mismo espacio y se requiere el cambio a un sector estratégico que no afecte a las familias que residen en la zona. Considera que no se puede permitir la vulneración de los derechos de ningún ciudadano.
Romel Reibán, presidente del barrio Alisos, manifiesta que las autoridades deben definir las medidas necesarias.
Para este próximo sábado, a las 17:00, se prevé una reunión con las autoridades, por vía telemática. “El que no esté presente será considerado como la piedra en el zapato”, expresaron los integrantes del movimiento “Reubicación de Burdeles”.

Insisten que los ciudadanos se deben involucrar en las problemáticas de la ciudad y conocer cuales serán las reformas del uso del suelo, donde se delimite una zona de tolerancia sin que afecte a zonas residenciales.

Los burdeles de la zona de tolerancia permanecen cerrados, debido a que no cuentan con la autorización para reactivar sus funciones debido a la emergencia sanitaria por COVID-19. Pero esto no implica que la prostitución se haya dejado de ejercer en Cuenca. La prostitución clandestina se ha expandido por diferentes sectores de la urbe. Hay casas particulares que han sido adecuadas para de forma encubierta convertirse en burdeles. Así, la prostitución clandestina está presente en las cercanías de la zona de tolerancia y se ha expandido hasta otros sectores.

Además, la problemática se ha incrementado en sectores que hasta antes de la pandemia ya era identificados por la existencia de la prostitución clandestina. Administradores de casas de citas piden la autorización de reapertura.

Fuente: El Mercurio