Mujeres latinas, europeas y de China han sido víctimas de femicidio en Ecuador

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Poner rostro a las mujeres asesinadas por el hecho de serlo se busca a través de la recolección de datos sobre su nacionalidad, edad, estado civil, entre otros. Así consta en el estudio Femicidio en Ecuador. Realidades ocultas, datos olvidados e invisibilizados.

También se busca indagar sobre posibles factores de riesgo o protección que sean útiles para la prevención del femicidio, señala el estudio. Este recoge datos desde el 2014, cuando el delito entró en el Código Orgánico Integral Penal (COIP), hasta el 2021, con un total de 1 045 femicidios.

En cuanto a nacionalidad, el 95% de víctimas son ecuatorianas (980 casos). Después están las mujeres provenientes de Colombia y Venezuela, con 20 y 15 casos, respectivamente. Entre mujeres peruanas, cubanas y argentinas se reportan cinco, cuatro y tres casos, en ese orden.

También han sido asesinadas tres mujeres de Nicaragua, El Salvador y Paraguay; dos europeas, una ucraniana y otra francesa. Y una víctima de femicidio es de China.

El rango de edad de las víctimas de femicidio oscila entre 1 y 83 años. En el estudio se señala que esto confirma que el femicidio afecta a las mujeres durante todo el ciclo de vida. Sin embargo, los datos muestran que la mayoría eran mujeres jóvenes: más de la mitad (53,1%) eran menores de 30 años. Y el 88,1% tenía menos de 50.

La media de edad del total de víctimas es de 37,5 años. Si se analiza solo la edad de las víctimas de femicidio por delincuencia organizada, el estudio señala que el promedio de edad es de 33 años. “De esto puede inferirse que las víctimas de la delincuencia organizada son más jóvenes, probablemente son hijas, parejas, exparejas o novias de hombres con armas o que pertenecen a bandas delincuenciales”.

Entre las víctimas están 44 niñas de hasta 10 años, señala el estudio. Esta realidad, dice, exige investigar las causas asociadas con estos delitos, aunque es posible inferir que buena parte de los casos estén relacionados con delitos sexuales.

El estudio muestra que la gran mayoría de las víctimas de femicidio eran solteras (557) y representan el 62,2% del total de casos. Más de la mitad de ellas (53,1%) no superaban los 30 años y el 15% eran menores de 18 años. Una de cada cuatro víctimas estaba casada o en unión libre (25,9%). Una de cada 10 (9,5%) era divorciada y el 2,5% era viuda.

La base de datos de Fundación Aldea hasta el 2021 no recoge información sobre si las mujeres víctimas de femicidio tenían una discapacidad, dice el estudio. En este se señala que al revisar las cifras oficiales se ha identificado un reducido número de casos. Esto “induce a sostener que los femicidios contra mujeres con discapacidad es una realidad oculta ya que poco o nada se denuncia sobre la vulneración a sus derechos”.

Fuente: El Comercio