A sus 35 años, Daniel Noboa pasó de ser una sorpresa electoral al llegar a la segunda vuelta, para finalmente convertirse en el nuevo presidente electo de Ecuador. Con el 98,04% de actas escrutadas, Noboa alcanza el 51.93% del respaldo popular, mientras que González obtiene el 48.07%.
En el primer balotaje, Noboa ganó en seis provincias, sobre todo en la Sierra, mientras que González venció en 14. Ahora, el escenario ha cambiado y el presidente electo se impuso en 16 provincias, mientras que González lo hizo en siete.
¿Dónde logró Noboa arrebatarle el voto correista y cuáles fueron las razones detrás de este cambio de tendencia? Aquí los detalles.
Noboa triunfa en seis provincias que apoyaron a González en primera vuelta
El mapa electoral que dejó la primer vuelta se pinta de manera muy diferente ahora. Recordemos que el pasado 20 de agosto, González venció en 14 provincias: Sucumbíos, Orellana, Morona Santiago, Cañar, Azuay, El Oro, Guayas, Los Ríos, Santa Elena, Manabí, Esmeraldas, Imbabura, Pichincha, y Santo Domingo.
Los electores de Daniel Noboa, en cambio, se impusieron en seis provincias: Carchi, Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo, Zamora Chinchipe, y Loja.
Sin embargo, los resultados de ayer, 15 de octubre, mostraron que Noboa logró captar seis provincias en las que en la primera vuelta Luisa González había salido victoriosa. Estas fueron: Azuay, El Oro, Cañar, Imbabura, Pichincha y Morona Santiago.
¿Por qué los electores no respaldaron nuevamente a González? La politóloga, candidata a doctora en estudios latinoamericanos y docente investigadora, Ingrid Ríos, menciona que esta segunda vuelta electoral experimentó varias transformaciones que definieron una nueva dinámica en la campaña política. Por su parte, Grace Jiménez, politóloga, agrega que el contexto en el que se dieron las elecciones de crisis política, de seguridad, la falta de acuerdo con las diferentes funciones del Estado, hizo que haya bastante expectativa por estos comicios.
Sin embargo, ambas concuerdan que el asesinato de Fernando Villavicencio influyó en el electorado. En la perspectiva de Ríos, esto afectó al correísmo, «desde la Revolución Ciudadana no lo manejaron de una forma correcta, la estrategia de ellos fue defenderse antes de ser acusados y eso, en esta campaña en particular sí les hizo daño».
Jiménez coincide en que se exacerbó el voto rechazo a Correa, «la primera vuelta nos demostró que hubo un voto sentimental, un voto anticorreista que se afirmó mucho más».
Noboa también logró ganar apoyo en provincias donde Christian Zurita, de Construye, había triunfado: Napo, Bolívar, Pastaza y Galápagos. Según Ríos, »las propuestas económicas de Noboa pudieron haber calado en las comunidades indígenas que no representan un voto duro correísta».
Ríos menciona que el debate presidencial de igual forma desempeñó un papel crucial. A pesar de las expectativas de una victoria para González, el candidato de ADN logró resurgir en términos de marketing político con su campaña viral de «los Noboa de cartón». Según Ríos, esta estrategia de campaña logró conectar con la población de manera efectiva.
Según Jiménez, los resultados también evidencian un enfrentamiento entre dos fuerzas políticas: una encarnada en un candidato y la otra en un partido. Esto revela que «hoy en día, la gente vota por personas y no por partidos».
Noboa logra arrebatarle Pichincha a González
González consolidó su apoyo en la Costa, asegurando su victoria en Esmeraldas, Manabí, Santo Domingo, Los Ríos, Guayas, Sucumbíos, Orellana y Santa Elena. Es notable que en esta última provincia, donde Daniel Noboa tiene su residencia y emitió su voto, no logró prevalecer.
En la primera vuelta en Guayas, Noboa obtuvo el 22.72%, mientras que Luisa González alcanzó el 37.92%. Sin embargo, el escenario se volvió más reñido, ya que la candidata correísta superó a Noboa por apenas un 3.94%, logrando un 51.97% frente al 48.03% obtenido por ADN.
Según Ríos, este resultado no es sorprendente, ya que la Revolución Ciudadana siempre ha tenido su bastión en la Costa. «Las elecciones seccionales demostraron que tenían un capital social que se mantuvo en estas elecciones».
Por otro lado, los resultados en la provincia de Pichincha, sí causaron sorpresa, pues Noboa logró arrebatarle votos al correísmo, donde en primera vuelta había ganado con el 26.43%. Los electores cambiaron de opinión y el candidato electo superó a González con 20 puntos, Noboa logró 60.13% en Pichincha frente a 39.87% de la correista.
Sobre ello, Jiménez expone que «en la Sierra y en la Amazonía, donde gana Noboa, son las mismas provincias donde ganaron Yaku, Hervas y Lasso, en 2021, la Sierra vota por una tendencia distinta al correísmo», afirma.
Por su parte, la politóloga Ríos, destaca la campaña en territorio llevada a cabo por Noboa en la Sierra, «de a pie, con las bases y no tan mediática».
Otro factor que pudo haber influido en esta Región es que, a pesar de que Noboa se ha autodefinido como de centro izquierda, «su imagen de familia y liderazgo es una imagen más conservadora que se alinea mejor con la visión cultural de la Sierra que sigue siendo muy conservadora».
Fuente: Ecuavisa
