Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró desde el miércoles la emergencia sanitaria internacional por la viruela del mono, el Ministerio de Salud aún no ha emitido un pronunciamiento.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) instó, desde la semana pasada, a los países de América a que refuercen la vigilancia y detección en laboratorios, pero nada se conoce de cómo enfrentará esta nueva alerta el Gobierno ecuatoriano.
El presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, Wilson Tenorio, cree que no hay que minimizar el riesgo y que sería un error que, con el antecedente de una pandemia en 2020, esta enfermedad tome nuevamente desprevenido al sistema sanitario.
«Hay que hacer vigilancia epidemiológica, activar los famosos hospitales centinelas, búsqueda activa de casos y la vacunación es una medida complementaria», señaló Tenorio.
En 2022, Ecuador registró más de 400 casos de viruela del mono, el Ministerio de Salud adquirió 5 800 dosis de vacunas que, según Tenorio, ya no están disponibles para enfrentar un nuevo brote del virus.
Así se desarrolla la enfermedad
La viruela del mono o Mpox es un virus altamente contagioso. Una persona puede transmitir la enfermedad hasta a 17 nuevos pacientes.
Los síntomas aparecen al sexto día, cuando las vesículas empiezan a ser visibles. Entre ellos se encuentran la fiebre, dolor de cabeza y espalda, mientras que al noveno o décimo día de contagio se observan llagas en la piel. Así lo explicó Pablo Espinoza, catedrático de la Facultad de Medicina de la Universidad Internacional del Ecuador.
Todavía se conoce poco de su letalidad; sin embargo, los grupos de riesgo son las personas de la tercera edad o con el sistema inmune debilitado en quienes los efectos pueden ser graves.
Fuente: Ecuavisa