El Alcalde de Cuenca, Marcelo Cabrera, rechazó la intervención de la Fiscalía en las oficinas de la Empresa de Telecomunicaciones y Agua Potable (ETAPA), ya que, según él, hay intereses que buscan desprestigiar la administración municipal.
«El mismo fiscal que realiza persecución política a Etapa, recibió nuestra denuncia penal sobre el tranvía el 27 de octubre de 2016 y no nos ha solicitado un solo papel», dijo Marcelo Cabrera, Alcalde de Cuenca, en radio La Voz del Tomebamba.
De igual manera, el burgomaestre exigirá al gerente del SERCOP que demuestre cuales son los hechos de corrupción cometidos en esta empresa. Estos contratos tienen un valor de USD$8 millones y tienen como objetivo ampliar la planta de agua en Tixán.
Cabrera sostuvo que estas denuncias son una persecución para dañar a la actual administración municipal. “Yo lamento al señor director del SERCOP que hable de corrupción en ETAPA. Él ya es juez, ya se adelanta a decir que hay corrupción. Tendrá que comprobar que efectivamente hubo corrupción”.
Además, insistió en que ha pedido un examen especial a la Contraloría General del Estado sobre los contratos firmados en ETAPA para varias obras en la ciudad ya que “no hay nada que ocultar. Aquí yo no defiendo a nadie. Si tienen que hacerse investigaciones, que se las haga. Si hay alguien que cometió algún error o ilícito, tiene que ser sancionado con el máximo rigor de la ley”.
Por último, solicitó a la Fiscalía una investigación a los contratos del tranvía. “Hemos enviado toda la documentación. Lo que me sorprende es la “agilidad” que se da en este caso, tratando de mancillar a una empresa emblema de los ecuatorianos como es ETAPA”.
Acerca del contrato del tranvía, el alcalde denunció que el Consorcio CCRC «utilizó la figura del Gobierno Vasco para burlarse de los cuencanos. Detrás está Isolux Corsán, una empresa privada quebrada», expresó en el programa La Hora de la Verdad de La Voz del Tomebamba.
(AEH)
Con información de Ecuadorinmediato
