El Gobierno de Estados Unidos amenazó este lunes 6 de enero del 2020 con más sanciones al Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y aseguró que incrementará la ayuda económica y diplomática para la oposición, liderada por Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por cerca de 60 naciones.
«EE.UU. hará más para ayudar a la Asamblea Nacional y su liderazgo legítimo, así como los esfuerzos del pueblo venezolano mediante una mayor presión contra la dictadura, sus líderes y aliados, dentro y fuera de Venezuela», avisó el enviado especial para Venezuela, Elliott Abrams, en una rueda de prensa.
Al respecto, Abrams precisó que la Administración estadounidense está evaluando tanto «cosas positivas como negativas». Con respecto a la parte positiva, recordó que el Congreso estadounidense ha aprobado USD 400 millones de ayuda para la oposición liderada por Guaidó y adelantó que Washington intentará convencer a otros países para que ofrezcan apoyo político, diplomático y financiero a las fuerzas opositoras.
«En el lado negativo -añadió-, estamos evaluando sanciones adicionales, sanciones personales, sanciones económicas que creemos que traerán más presión al régimen». Abrams no ofreció más detalles sobre esas sanciones, aunque desde hace tiempo las autoridades estadounidenses han criticado a la petrolera estatal rusa Rosneft, que participa en Venezuela en numerosos proyectos de extracción junto a la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
El enviado especial, además, reconoció que Washington cometió un error al «subestimar la importancia del apoyo ruso y cubano al régimen» y aseguró que ambos países han probado ser «importantes pilares» para el Ejecutivo de Maduro. EE.UU. fue el primer país que reconoció en enero de 2019 a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela y, desde entonces, ha emprendido una campaña destinada a derrocar a Maduro mediante la imposición de sanciones contra empresas y funcionarios, incluido el hijo del presidente, Nicolás ‘Nicolasito’ Ernesto Maduro Guerra.
Este domingo, los diputados chavistas de la AN eligieron como presidente del organismo a Luis Parra, antiguo miembro del partido opositor Primero Justicia, en un bronco y breve debate al que no llegaron ni Guaidó ni un grupo de diputados, a los que la Policía impidió la entrada.
Después de que se le impidiera la entrada, Guaidó celebró una sesión de la Asamblea Nacional en un periódico y resultó elegido presidente del órgano legislativo. Poco después de esos sucesos, el Gobierno de EE.UU. anunció que seguiría reconociendo a Guaidó como presidente interino de Venezuela y que consideraba «una farsa» la votación de los diputados chavistas.
Fuente: El Comercio