En su propuesta de consulta popular en Ecuador, el presidente Daniel Noboa incluyó reformas penales que buscan luchar contra el crimen organizado y fortalecer la seguridad ciudadana.
Son en tres ámbitos: incrementar penas, eliminar beneficios carcelarios para delincuentes que hayan cometido cierto tipo de delitos y entregar armas incautadas a las fuerzas del orden.
El texto propone incrementar penas para 10 delitos, entre ellos, terrorismo, delincuencia organizada, sicariato, tráfico de armas y secuestro.
La propuesta no define en cuánto aumentarán las penas. Solo menciona que en caso de que gane el sí, el presidente enviará a la Asamblea, en un plazo de cinco días, un proyecto de reformas que debería ser aprobado en 60 días.
Fuera del agravamiento de penas, el Presidente quiere eliminar los beneficios carcelarios en 12 delitos.
Es decir, que no puedan salir en libertad anticipada quienes sean sentenciados por tráfico de drogas, tenencia de armas, extorsión, terrorismo, tráfico de influencias, testaferrismo, entre otros.
En la actualidad, esos presos pueden beneficiarse del régimen semiabierto y abierto; sistemas que permiten salir de las cárceles tras haber cumplido el 60% de sus sentencias.
Dos reformas adicionales en las preguntas de la consulta tienen que ver con el control, porte y uso de armas. Se busca que se tipifique la tenencia y porte de armas y municiones de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y la Policía.
Se complementará con una reforma al artículo 66 del Código Integral Penal para que las armas incautadas pasen al servicio de las fuerzas del orden.
La Corte Nacional ya dispuso que los jueces declaren de utilidad pública las armas incautadas, pero la consulta, de ser aprobada, la vuelve obligatoria. En las bodegas de la Policía Nacional hay actualmente 42 mil armas incautadas.
Todas las reformas penales planteadas en la consulta, en caso de que gane el sí, requieren ser debatidas y aprobadas en la Asamblea.
Fuente: Ecuavisa
