La exposición de las soluciones para el cuidado del medioambiente se desarrollará por sexto año consecutivo en el Puerto Santa Ana, en Guayaquil. Por sexto año consecutivo se expondrán en Guayaquil los mejores 500 proyectos ambientales de América Latina y el Caribe.
Hoy, con la inauguración de los Premios Latinoamérica Verde, se iniciará su exhibición en Puerto Santa Ana. La actividad -que es organizada por el Municipio de Guayaquil, mediante la Dirección de Ambiente- se extenderá hasta el 25 de agosto.
Bolívar Coloma, titular del departamento, aseguró que los Premios Latinoamérica Verde son un laboratorio donde se acogen distintas iniciativas ambientales. Precisamente en esta nueva edición se inscribieron 2.332 proyectos socioambientales provenientes de 603 ciudades.
En mayo pasado, un comité técnico internacional seleccionó los 500 mejores proyectos, de los cuales ya han sido escogidos 30 finalistas en las 10 categorías que competirán durante la premiación.
Entre los finalistas están presentes tres proyectos ecuatorianos, estos son: Fondo de Páramos Tungurahua y Lucha Contra la Pobreza, en la categoría Finanzas Sostenibles; Solución para la Basura en Patios de Comida, en Manejo de Residuos Sólidos.
Y Rebird Project, dentro de la categoría Producción y Consumo Responsable. Este último consiste en el no uso de insecticidas en cultivos. La gala de la premiación se desarrollará el próximo 24 de agosto.
Este año la exposición se extenderá por cuatro días. Coloma explicó que debido al número de expositores, la ciudadanía podrá visitarla el fin de semana. Por ello en esta edición habrá muestras de fotografías, esculturas y pinturas relacionadas al medioambiente.
También murales pintados, esculturas de plástico, mandalas de madera reciclada y esculturas de vidrio reciclado. Hoy se desarrollará el Diálogo de Economía Verde y Desarrollo Sostenible.
En esta actividad se realizarán tres paneles que abarcarán los distintos enfoques relacionados al rol del Estado y del sector financiero para dinamizar la economía verde en la región.
Fuente: El Telégrafo