Un total de 50 operadoras de transporte escolar de Cuenca se han organizado para desarrollar una marcha pacífica con el fin de solicitar atención en cuanto al financiamiento de deudas bancarias por adquisición de sus unidades.
Saldrán hoy desde dos sitios, el primero desde la sede de la Federación de Transportistas Escolares e Institucionales, ubicada en la Avenida Las Américas, sector Miraflores y el segundo grupo partirá desde el Mercado 27 de Febrero; ahí se concentrarán para dirigirse hasta la Gobernación del Azuay, desde las 09:30.
Serán 400 unidades de transporte las que en hilera se trasladarán desde Miraflores, recorrerán el Barrial Blanco, pasarán por la Chola Cuencana y se dirigirán hasta el Centro Histórico; mientras que el otro grupo con igual número de unidades recorrerá la Avenida Solano, Avenida Doce de Abril subirán por la Condamine, calle Tarqui y la calle Sucre, hasta conectarse con el otro grupo.
El representante del gremio, Mauro Viñansaca, sostuvo que esto significa el sentir de los 790 conductores de este sector en Cuenca, que también están “muy golpeados” por la pandemia del covid-19.
Un crespón y una camiseta negra los identificará, “porque estamos de duelo, pues dependíamos de las instituciones educativas, con las que teníamos contrato, sin embargo no ha sido posible reactivarnos”.
La idea es presentar un manifiesto al gobernador Xavier Martínez, y el funcionario a su vez lo haga llegar al Gobierno Nacional, para que se canalice el apoyo.
“Lo que requerimos es que la banca nos conceda moratoria de 12 meses a los créditos adquiridos para una renovación de las unidades”, indicó Marco Aucapiña, miembro del gremio.
A nivel nacional, todas las federaciones saldrán en una marcha pacífica con este motivo: “Hacer conciencia de que nosotros también estamos prácticamente en la quiebra”.
Actualmente, solo un 10 por ciento de las unidades se encuentran en servicio, por contratos esporádicos que han logrado adquirir por las empresas productivas; sin embargo, son centenares de socios los que están en esta situación.
Esperan que la banca tome consideraciones en el tema, por lo que no quieren que las unidades sean embargadas y les quiten su “única herramienta de trabajo” con la que desde hace tres meses no han podido circular debido a la crisis.
La marcha pacífica busca hacer la entrega del manifiesto y luego se retirarán del sitio.
Fuente: El Tiempo
