En Ecuador estamos observando que solo gente de clase alta se está vacunando, saltándose la fila, afirma la epidemióloga Andrea Gómez

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Hace dos semanas, aproximadamente, el Gobierno anunció que el inicio de la inscripción para la vacunación de personas mayores de 65 años a través de la página www.planvacunarse.ec sería desde hoy, 15 de marzo, pero este portal colapsó. A la par, se conocieron videos y fotos en redes sociales que mostraban a personas con “influencias” que se saltaron la fila para obtener las dosis.

El actuar del régimen en la aplicación de las vacunas genera desconfianza y descontento en la población. Además, está creando un conflicto social que no se debería dar, en especial en el contexto de una pandemia donde se debe entender que hay que salvar a todo un país, dice Andrea Gómez Ayora, epidemióloga y salubrista.

El Ministerio de Salud Pública anunció un registro digital para los adultos mayores de 65 años, pero para la fase 2, donde participarán las personas de entre 18 y 64 años, no se necesitaría inscripción. ¿Esta división es correcta? ¿No causa confusión o desconfianza?

Cada vez que el Gobierno ha dicho que va a hacer algo y no lo hace aumenta la desconfianza y descontento de la población. Desde hoy 00:00 miles de personas estuvieron pendientes de la página para inscribirse (y no se pudieron registrar). Luego, a las 09:00, (cuando se iniciaría formalmente el registro) muchas personas accedieron y la página colapsó porque está dentro de un servidor que tiene múltiples páginas, era previsible que esto pasaría.

También era previsible que mucha gente se conectara al mismo tiempo. Hay aproximadamente un millón de personas mayores de 65 años, el 49% tiene acceso a internet (a 2018), entonces 500.000 personas estaban intentando acceder a la web. Además, ¿qué pasa con el resto que no tiene acceso a internet?, ¿quedarían fuera de la lista? No hubo una valoración de la realidad que vive el país, no están claros los criterios.

Tampoco entiendo la justificación que hay detrás de esta inscripción cuando se habla de que la siguiente fase no habrá registro, sino que se va a organizar (por sectores). No hay concordancia de una decisión y otra.

¿Se han tomado malas decisiones en el plan de vacunación?

Ha sido un proceso bastante complicado que ha generado mucha desconfianza en la ciudadanía por los sinsabores que ha dejado el proceso desde que llegaron las vacunas y el manejo de la pandemia.

Uno de los problemas que ha tenido el Ministerio de Salud y las autoridades es que no han tomado decisiones basadas en evidencias, respaldo científico. En el plan de vacunación hay contraindicaciones. Ha existido una fase cero, que no se ha dado en otras partes, con tan pocas vacunas que no fueron bien distribuidas.

Todo esto ha generado desconfianza en la población y en un proceso que es tan delicado e importante para el control de una pandemia esto no se puede permitir, ya que la vacuna no es obligatoria.

Tenemos una fase uno que es gigante. Colocaron una gran cantidad de población allí y esto es un esfuerzo muy grande, enorme. Quizá debieron dividir la fase por etapas hubiese sido mejor. Quieren vacunar a millones de personas en una sola fase y es muy probable que no alcancen.

Hay múltiples errores que siguen creciendo y no solo con la vacunación sino con el manejo de la pandemia. Hasta el día de hoy no hemos visto una curva epidemiológica explicada por los ministros de Salud. Solo sabemos la situación epidemiológica por los medios de comunicación. La situación del país es compleja, complicada.

La desconfianza también se da porque tiktokers y personas de clase media y alta con “influencias” se han inoculado sin ser prioridad. ¿Es necesario que el Gobierno publique las listas de las personas vacunas en las fases 0 y 1?

A nivel mundial ha sucedido que hay seis dosis designadas y una persona no se la colocó por alguna contraindicación, entonces, en ese rato, se la aplica a la persona que esté más cercana, de forma aleatoria y es raro que pase, pero en el país esto no se está dando al azar sino que se llamó a personas, entonces es una mala distribución de la vacunas.

¿Por qué para la fase 2 habrá una lista pública y por qué no se puede saber las de la fases 0 y 1? ¿A quiénes se esconde? Esto lo que hace es generar más desconfianza. Países que han pasado por esto como Argentina y Perú han publicado las listas y se pidieron las renuncias de los respectivos ministros. ¿Qué pasó en Ecuador? El presidente respaldó al exministro y ya se fue del país.

Este Gobierno ha dicho que no va a revelar las listas, entonces deberá hacerlo el próximo régimen, eso generará confianza en el proceso. Se necesita transparentar el proceso y el exceso de mortalidad, que es el segundo a nivel mundial detrás de Perú.

Este fin de semana se filtraron videos en redes sociales sobre la vacunación en el Club Rotario y usted ha sido crítica de este evento, ya que, asegura, las personas que se están inoculando tienen menor probabilidad de contagio por su estatus económico…

Se conoce, y hay mucha evidencia, que la probabilidad de contagio tiene una relación directa con el nivel socioeconómico. A mayor nivel socioeconómico, menor es el riesgo de contagio porque no necesitan salir de casa, exponerse.

Las personas con nivel socioeconómico bajo necesitan salir, movilizarse por medios de transporte públicos para ir a sus trabajos, lo que aumenta su probabilidad de contagio.

Lo que hemos visto estos últimos días genera otro conflicto que es la circulación libre del virus (ya que las clases populares no han sido vacunadas y tienen mayor número de población), el aumento de la probabilidad de que haya mutaciones del virus que evadan el efecto de la vacuna. De esto no se habla (en el Gobierno).

Las personas que están en primera línea, que no son médicos, no han podido acceder a la vacuna y, en cambio, otras que tienen un bajo riesgo de contagio se han vacunado.

Las voces que defienden la vacunación en el Club Rotario afirman que el ente y sus asociados han ayudado a damnificados en el país…

No se justifica. Están tomando ese argumento como si tuvieran una mayor calidad moral que los demás y eso no es real. La solidaridad es una relación horizontal. La caridad es una relación vertical. La persona no tiene más poder cuando ayuda a otro.

El Club Rotario está dando mal ejemplo. Colocan a la población en una situación de un sálvese quien pueda y un todos contra todos. No estamos siendo conscientes, tanto las autoridades como los que están aceptando vacunarse, de que si no estamos vacunados todos y, en especial, los que tienen un gran riesgo de contagio, no estamos a salvo como país. Esto es un problema estructural y es grave.

Estamos observando, como meros espectadores, que solo la gente de clase alta, no todos, se están vacunando, saltándose la fila. Esto también genera un conflicto social que no se debería dar.

Fuente: El Universo